Valerio Albisetti - Il viaggio della Vita

Muchas veces, después de una herida sentimental, se tiene la sensación que toda la persona fue lastimada, mientras se tiene que saber que vinieron golpeadas sólo algunas partes de la personalidad. Se tiene de todo modo que evitar de complacerse del propio estado de víctima, comprender cual parte de nosotros fue lastimada y porque. Detrás de cada sufrimiento causado por una perdida, por una ofensa sentimental, siempre se esconde algo de nuevo que debemos conocer de nosotros...

<!– .hmmessage P { margin:0px; padding:0px } body.hmmessage { font-size: 10pt; font-family:Verdana } –> Una vez separados, es instintivo que llegue el enojo, la ira, el deseo de venganza. Si no ponemos en acto estas emociones, no podemos negar que stamos sufriendo, negar que fuimos heridos, porque sepultando estas emociones en el inconsciente podemos después sufrir de depresiones, de crisis improvisas, de agresividad. Existe también otra forma, pasiva, de...

Cuantas veces apena salidos de un dolor vivido por una relación afectiva quebrada, creemos de no poder ya amar, ni de poder ser amados. Somos llevados a permanecer encarcelados en el dolor que hemos vivido, a desconfiar de todo y de todos, a perder la propia autoestima, si no logramos de recrear armonía en nosotros mismos, de manejar bien el enojo que permanece en nuestros...

Si no nos liberamos definitivamente de las heridas subidas, tenemos el riesgo de perder fuerza, vitalidad, y también de romper la propia identidad. Si las heridas no son superadas, sanatas, bloquean el camino de crecimiento personal. No tenemos que negar que estamos sufriendo por haber sido dejados, porque sepultando estas emociones en el inconsciente, podemos sufrir de depresiones, de crisis improvisas, de agresividad, o de una completa deslocación en el inconsciente de...